Fuerte apache. EPD 4.

En nuestra práctica del 11 de diciembre vimos la película Fuerte apache en el que observamos el papel que debía desempeñar un educador social en función de las diversas historias que forman las vidas de los niños que reside allí. El centro que se nos presenta está situado en Barcelona.

Los niños que aparecen en este centro tienen problemas relacionados con la droga dicción o la delincuencia  y han de ser reeducados por los educadores sociales, acompañados de un equipo multidisciplinar en el que también observamos psicólogos o  trabajadores sociales. Están  internos de forma permanente  aunque con un permiso se les permite la salida del centro.

Hay un niño magrebí menor de edad que ingresa en el centro sin ningún motivo, simplemente porque había quedado una plaza libre y al entrar en el centro su relación con los demás le resulta complicada. Es por eso que tiene dificultades para desenvolverse.  En su país de origen este chico vivía con un tío del que recibía agresiones físicas ya que sus padres habían muerto. La diferencia que se observa es que este chico veía el centro como una buena salida, a diferencia de los demás, que se sienten como encarcelados.

Durante la película va estableciendo una buena relación, cada vez más, con Toni, el educador social del centro y esto hace que se vaya sintiendo cada vez más a gusto en el lugar. Este educador social representa un papel fundamental en la película. Se nota la vocación que tiene en su trabajo pero llega a tener algunos problemas personales debido a que no es capar de desvincularse de su trabajo cuando sale de él, podríamos decir que se lleva los problemas a casa. Además en algunos momentos del vídeo podemos observar cómo se siente frustrado por momentos, al ver que su gran esfuerzo y dedicación no hacen que se cumplan los objetivos que se ha propuesto con los chicos del centro. Debido a esto vemos como en un momento del vídeo pierde los papeles e incluso llega a insultar a los niños.

Es una película muy interesante que muestra lo duro que es realmente el trabajo de educador social, con respecto a las relaciones personales y a lo duro que es tratar con personas que tienen verdaderos problemas. Hay que ser conscientes de los problemas de las personas con las que en un futuro mis compañeros y yo vamos a tratar, debemos concienciarnos para cualquier cosa y saber que la realidad siempre es peor a todo lo que nos puedan contar.  No todo en nuestro trabajo es duro y negativo, pocas personas podrán sentir la satisfacción que siente un educador o un trabajador social cuando cumple los objetivos que se propone  con una persona o un colectivo.